miércoles, 10 de junio de 2015

Chica Cactus.

A veces pienso que soy como un cactus,
a primera vista seca y arisca, pasando fácilmente desapercibida.
Pero bajo esas espinas hay vida, 
una vibrante y con
ganas de salir. 
De que se la tenga en cuenta, de que la vean 
y le hagan caso.

Y a veces, los cactus florecen, sus flores
son de colores vivos: rojos, azules, rosas...
No son secos ni tan ariscos, 
sólo tienes que ver la belleza que hay en sus espinas,
la belleza que hay detrás de ellas,